Europa

Las claves de Vox ante el 28M: estancamiento y plazas decisivas

Vox concurrirá a las elecciones autonómicas y locales del próximo 28 de mayo en medio de su primera crisis de proyecto. Las plazas autonómicas son históricamente donde peor experiencia han tenido en su corta historia y donde más crisis comunicativas se han abierto sobre un partido que nació apelando a la eliminación de estas cámaras.

Las últimas elecciones autonómicas y locales se produjeron entre las primeras y las segundas elecciones generales de 2019 en las cuales Vox se impulsó desde los 24 hasta los 52 diputados. Es decir, todavía no había consolidado su espacio cuando se disputaron por última vez, por lo que se espera un crecimiento respecto a esa etapa tan inicial, que sin embargo debería ser moderado debido a esta crisis del proyecto.

El discreto mapa autonómico de Vox

Si los comicios de 2018 en Andalucía supusieron su irrupción en la arena política y le sirvieron de trampolín para las elecciones generales del año siguiente, las propias elecciones andaluzas de 2022 en la que pasaron de 12 a 14 escaños son su techo histórico autonómico y marcaron un cambio de ciclo hacia una crisis de reputación que aún a día de hoy persiste.


plazas decisivas de Vox el 28M (Verde oscuro: Plazas donde Vox podría ser decisivo, verde claro: Plazas donde Vox podría ser importante. Azul: plazas donde Vox apuntaría a tener poco peso en la conformación de gobiernos). Fuente: Elaboración propia

Si sus únicas plazas relevante de poder en toda España son las Cortes de Castilla y León, donde suma 13 diputados y comparte gobierno con el PP; en la Comunidad de Madrid con otros 13 asientos; y otros 11 en Cataluña, son los únicos cuatro lugares donde suma más de 10 diputados. Se podría añadir quizá también los 9 que suma en Les Corts en el País Valenciano.

Sólo en estos cinco lugares, donde hay altas magnitudes electorales (cifra total de diputados de una circunscripción) ha logrado números relativamente relevantes sin contar Ceuta, donde tiene 4 de los 25 diputados de la ciudad autónoma.

Además de esto, cuenta con 3 diputados en cada una de las cámaras de Aragón y Baleares, 2 en las de Cantabria, Melilla y Asturias y 1 diputado solitario en Euskadi y Región de Murcia. En esta comunidad autónoma, donde llegó ser primera fuerza en las elecciones generales de 2019, las escisiones y abandonos de grupo parlamentario han dejado solo a Pascual Salvador si bien obtuvieron 4 escaños.


Mapa de representación autonómica de Vox. Fuente: Elaboración propia

En otras seis autonomías (Canarias, Castilla la Mancha, Galicia, La Rioja, Navarra y Extremadura) no tiene ninguna representación parlamentaria. Pese a tratarse de la tercera fuerza en el Congreso de los Diputados y haber experimentado recientemente su irrupción, sólo Ciudadanos de entre las otras seis fuerzas presentes en todo el estado tiene menor representación parlamentaria (fuera de siete autonomías), mientras que otras fuerzas como Unidas Podemos (UP) se quedaron sin representación en cinco autonomías y el Partido Popular (PP) en dos, Euskadi y Navarra donde hasta hace poco tenía un acuerdo con Navarra Suma).

Se podría decir que el máximo éxito electoral de Vox en unas elecciones autonómicas fueron sus resultados en Cataluña. Sus discretos 11 diputados representan distintas victorias pues pese a tratarse de la cuarta fuerza en diputados, también es la segunda de entre los referentes estatales sólo tras los 33 del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), por delante de los 8 de En Comú Podem, los 6 de Ciudadanos (en su propio feudo histórico) y los 3 del PP. Victorias que se tienen que poner en contraste con la hegemonía de las fuerzas progresistas estatales, que cuentan con 41 diputados, frente al bloque de la derecha, con 20 representantes.

Las poco ambiciosas expectativas electorales de Vox el 28M

Las encuestas han mostrado una tendencia a la baja por parte del partido liderado por Santiago Abascal, que desde 2020 ha experimentado un retroceso que se ha visto plasmado en casi todas las citas electorales a las que ya ha concurrido. Vox parte con la demoscopia en contra, que si bien (como suele suceder con alternativas políticas de nuevo cuño) infravaloraba al partido ultraderechista en su irrupción tras el ciclo de 2018, ya han tomado la medida al partido de Abascal.

Las plazas electorales donde se espera que Vox consolide su espacio según los promedios de las encuestas son: Baleares, donde indican que podría aumentar su presencia de 3 a 7 asientos parlamentarios; Castilla La Mancha, donde podría irrumpir con 3 escaños decisivos para el bloque de derechas; el País Valenciano, donde apuntaría a conquistar pasar de 11 a 16 escaños; Extremadura donde entraría por primera vez con 6 diputados; Aragón, que según el promedio de encuestas ascenderá de 3 diputados a 7; y en Murcia donde conseguirían 3 diputados más pasando de 4 a 7 actas.

Sin embargo, en el resto del mapa sus números son más discretos e indicativos de este retroceso: en Asturias subiría de 2 a 4, en Canarias podría irrumpir con una sola acta, misma proporción que aumentaría en Cantabria y Melilla de 2 a 3 actas, en Navarra y la Rioja irrumpiría con 2 parlamentarios, mientras en Madrid pierden una de sus actuales 13 actas en favor de un PP con altas expectativas, menguando también en Ceuta de 6 a 5 sillas.


Reparto de escaños según el promedio de las encuestas: Fuente: RTVE a partir de las encuestas publicadas.

Pese a ser tan poco significativas estas diferencias, en Navarra, La Rioja, País Valenciano, Castilla la Mancha, Aragón, Canarias y Baleares ponen en jaque la continuidad de la izquierda quedando muy ajustada la pugna por los escaños. Esto implica que en estas autonomías podría ser decisivo para gobernar y tener poder negociador para obtener puestos de gobierno así como concejalías de importantes ayuntamientos como València, Madrid o Sevilla.

Esta tendencia, que no es más que la fotografía demoscópica del momento, puede variar, tal y como se vio en la campaña andaluza con variables como los candidatos (que en algunos lugares clave como València, Madrid o Murcia son perfiles arriesgados como Ortega Smith y Rocío Monasterio o Flores-Juberías que podrían estropear la campaña como en el caso andaluz).

Solo queda Feijóo«

La moción de censura de Santiago Abascal en 2020 como órdago contra el PP fue un punto de inflexión en la historia de esta joven formación. El poder electoral mesiánico de la presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso y la habilidad retórica de Pablo Casado, quien no dudaba en enfrentarse discursivamente al partido de ultraderecha, eran el telón de fondo.

En aquella censura, Casado defendió la política tradicional y el orden constitucional establecido frente a los planteamientos de su adversario, afeándole sus posiciones internacionales y el espíritu disolutivo del trámite y quedando ante la opinión pública como el gran beneficiado de la moción.

Desde ese momento, Vox quedó desdibujado y marginado de la agenda política, en el contexto de una pandemia, una guerra de grandes dimensiones en Ucrania, varios escándalos del gobierno y una crisis de inflación, mientras todo el resto de espacios convulsionaba: el PSOE ha sufrido un desgaste considerable, Ciudadanos está en fase de liquidación, el independentismo parece replegarse hacia el regreso al autonomismo y la izquierda está inmersa en una serie de confrontaciones por la marca, el liderazgo y la unidad. El PP, su principal adversario electoral, sufrió la caída en desgracia de Casado, su primer líder elegido en primarias, tras denunciar un trato de favor de su compañera Isabel Díaz Ayuso en la adjudicación de un contrato cuestionable a su hermano.


Mapa: proyección demoscópica de Vox para el 28M. Fuente: Elaboración propia a partir de los promedios de encuestas

Todos estos elementos hacían predecir unos buenos resultados a la ultraderecha como voto de castigo a un sistema político quebrado– No obstante, la crisis interna abierta en la formación a raíz de las elecciones madrileñas y andaluzas de 2021 y 2022 respectivamente, en las cuales Rocío Monasterio y Macarena Olona no lograron representar sino una perturbación del espacio político y la implosión a lo largo de 2022 personificada en su candidata “andaluza”, apaciguaron estos pronósticos.

El Partido Popular ha absorbido toda la proyección electoral de Vox bajo el liderazgo sincrético y camaleónico de Alberto Núñez Feijóo, quien ha sabido escenificar un “giro al centro” metódico y moderado pese a que sus posiciones políticas en materias como los pactos con la ultraderecha, migración, economía o diversidad se han incluso radicalizado en cierta medida desde la época de Casado.

Lejos de suponer un respiro, a escala política esto representa un peligro añadido para la izquierda, puesto que como se ha escenificado en Castilla y León allí donde la derecha sume habrán pactos entre Vox y el PP; el discurso más pragmático del PP podría hacer a un electorado más moderado refrendar indirectamente en las urnas gobiernos de ultraderecha pese a encontrarse esta en crisis; es decir, la amenaza de Vox se ha trasladado a la capacidad del PP para obtener mayorías que otorguen a la ultraderecha posiciones de gobierno. La moderación retórica de Feijóo que ha minimizado el potencial político de Vox paradójicamente es su mejor baza para llegar al poder.

Las claves de Vox ante el 28M: estancamiento y plazas decisivas

Denis Allso

Articulista. Estudiante de Ciencias Políticas. Activista y cofundador en varias organizaciones sociales y sindicales de izquierda valencianista. Primer coordinador de BEA en la UMH y ex-rider sindicado. Analizar al adversario es la única forma de no perder la perspectiva de lo que se hace y es un deber moral cuando de ello dependen las vidas de las personas más vulnerables.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *