Vox propone que los avisos por emergencia lo reciban solo quienes lo hayan pedido
En la última rueda de prensa ofrecida por Santiago Abascal, líder de Vox, ha planteado que los avisos por emergencia solo puedan ser recibidos las personas que previamente así lo hayan comunicado. El planteamiento es, al tener literal de su comparecencia y que han recogido medios como Europa Press, que «puede haber personas que no quieren recibirlos y deben ser respetados».
Estas declaraciones se han sucedido a raíz de que, este domingo, las personas residentes en la Comunidad de Madrid recibieron una notificación en sus teléfonos móviles. Se trataba de un aviso, acompañada de un pitido, de la Agencia de Seguridad y Emergencias de Madrid (ASEM), un organismo dependiente del gobierno autonómico que decidió lanzar dicho aviso ante las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) de la llegada del fenómeno meteorológico conocido como DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), también llamado gota fría, y que amenazaba con provocar situaciones de peligro en la región debido a las fuertes lluvias asociadas a dicho fenómeno.
El aviso vino acompañado, además, de las declaraciones del alcalde de la ciudad de Madrid, José Luis Martínez Almeida, que aconsejó a la gente a no salir de sus casas. Desde el Ayuntamiento de Madrid, ante la elevación de la AEMET a la situación de «alerta roja», se activó el protocolo del Plan de Actuación de Inundaciones (PAINUNAM), tal y como puede leerse en su propio sitio web.
Lo que podría ser considerado una anécdota más, provocó cierta división entre el espectro de la derecha y en el espacio de la extrema derecha. Mientras que Javier Ortega-Smith, uno de los vicepresidentes de Vox, le pareció adecuado el aviso, Jorge Buxadé, otro de sus pesos pesados, lo consideró exagerado, declarando que las predicciones de la AEMET no son exactos, provocando un debate en sobre la cuestión.
Avisos por emergencia, conspiración y extrema derecha
Diversos perfiles, creadores de contenido y altavoces relacionados con el espacio de la extrema derecha e incluso afines a Vox señalaron este aviso, recibido en todos los dispositivos móviles, como una intromisión a la privacidad de los usuarios. Algunos incluso plantearon, dado que finalmente las previsiones no fueron tan catastróficas en la capital (aunque sí en localidades de la comunidad o en ciertas zonas de la ciudad, donde se han registrado inundaciones), que se trataba de una suerte de experimento sociológico para comprobar el nivel de obediencia de la ciudadanía.
Una de las situaciones más inverosímiles la protagonizó Jorge Bustos, subdirector del diario El Mundo, que en su cuenta oficial en la red social Twitter publicó un tuit, borrado más adelante, donde calificaba el aviso por emergencia de «pitido orwelliano» (en referencia a George Orwell, autor de la obra 1984, que trata sobre un mundo gobernado por dictaduras totalitarias que vigilan cada paso de las personas). «Cuál es el siguiente paso de la intrusión del Estado en la privacidad del ciudadano», planteó.
Después de que Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, se posicionase favorablemente acerca del aviso por emergencia, y tras las indicaciones de varios usuarios de que el aviso no procedía del gobierno central sino del autonómico, el tuit fue borrado por su autor.
No obstante, eso no le ha impedido, ni a Jorge Bustos ni a otros usuarios, de manifestarse en contra de este tipo de medidas argumentando que es un peligro y una intromisión en la privacidad que las instituciones públicas tengan los teléfonos de la ciudadanía y puedan emplearlos de forma arbitraria. De hecho, el propio alcalde de Madrid o Juan Manuel Moreno Bonilla, presidente de la Junta de Andalucía, adoptaron una posición crítica hacia la AEMET, argumentando que lanzar un aviso por emergencia de estas magnitudes requiere de una mayor precisión.
Sin embargo, estas posturas chocan una vez más con la realidad. Y es que las instituciones públicas no necesitan conocer los teléfonos móviles de la ciudadanía para enviar estos avisos por emergencia, ya que funcionan a través del sistema europeo EU-Alert, integrado a su vez en la Red de Alerta Nacional, operativo desde el 1 de febrero de 2023.
EU-Alert es un protocolo de difusión y recepción de alertas que funciona mediante la tecnología cell broadcast o de difusión por celdas, que permite que las antenas de telefonía móvil situadas en una zona muy determinada envíen el mensaje a los teléfonos móviles que reciben su cobertura de manera autonómica.
Paradójicamente, lo que propone Santiago Abascal desde Vox de autorizar previamente la recepción de estos mensajes, implicaría ceder datos personales a las instituciones públicas, más allá de constituir un riesgo evidente al no poder realizar los avisos por emergencia a toda la población. Pues, muy probablemente, muchas personas no realizarían este hipotético trámite por desconocimiento y/o por un deficiente manejo de las tecnologías, como podría suceder con personas ancianas y/o residentes en municipios de baja población.
Por el contrario, este sistema de alertas se ha implementado colaborando con Protección Civil, un servicio delegado a las autonomías, conjuntamente con varios ministerios, y se adapta perfectamente al Reglamento General de Protección de Datos de la Unión Europea, considerado uno de los sistemas de protección de la privacidad de los usuarios más fuertes del mundo.
El Gobierno ha implementado el sistema de alertas, en colaboración con los servicios de Protección Civil de las comunidades autónomas, en un proyecto conjunto de los ministerios de Asuntos Económicos y Transformación Digital y el Ministerio del Interior, como parte de la Red de Alerta Nacional (RAN) de Protección Civil.
Por otro lado, lo que Santiago Abascal y desde Vox parecen ignorar es que, de hecho, es posible cancelar la recepción de dichas notificaciones. Entre octubre y noviembre de 2022 ya se empezó a probar este sistema en territorios como Asturias, Cantabria o Andalucía. Y, tal y como informa el medio Xataka, desde el menú de Ajustes pueden configurarse estos avisos por emergencia, si bien recomiendan no hacerlo.
Sin embargo, la realidad de los datos y de la situación provocada por la DANA no ha impedido a muchas personas afines a la extrema derecha realizar críticas tanto a la AEMET como al gobierno central, apoyándose en la idea de que existe un control ciudadano arbitrario que se aprovecha de los miedos de la gente.
Un pensamiento conspiracionista que se ha sumado, en muchos casos, al discurso negacionista acerca del cambio climático. «Terrorismo de estado», «hoy ha tocado asustar al borrego de Madrid con falsas llluvias que han sido disueltas con la geoingeniería», «aemet, nido de controladores de nubes grisáceas que van y vienen…», son algunos de los tuits que se han podido leer entre el domingo y el lunes.
Un argumentario que ha sido impulsado desde partidos políticos como Vox y otros espacios de la extrema derecha con el objetivo de justificar un discurso político y unas acciones que confronten directamente cualquier apuesta por adoptar medidas de protección del medio ambiente, incluyendo regulaciones de la actividad económica que prioricen la reducción de la huella de carbono o la contaminación y que afectarían directamente a muchos de los grandes capitales.
No es de extrañar, por lo tanto, que la inmensa mayoría de los perfiles que apoyan estas conspiraciones, no solo la de los avisos por emergencia, sino también incluyendo aquellas que giraron alrededor de la pandemia de COVID19 y que se usaron como punta de lanza para confrontar las medidas de restricción de movilidad y de reducción de la actividad productiva para reducir los contagios del virus, parecen tener afinidad con líderes, partidos, grupos o personalidades relacionadas con la extrema derecha. No en vano, el discurso de la extrema derecha se asienta sobre el pensamiento negacionista.
La realidad: el enemigo de la extrema derecha
Afortunadamente, han sido muchos los usuarios que han argumentado en contra de estos posicionamientos en referencia a los avisos por emergencia. Uno de estos argumentos, además de señalar el evidente peligro que puede suponer no optar por la prevención en caso de duda, ha sido la incoherencia que supone quejarse por una sencilla notificación en el móvil que puede salvar vidas, pero no hacerlo cuando son las empresas las que utilizan los datos privados de las personas con fin de lucro.
Una vez más, la extrema derecha y su discurso suponen un peligro evidente para la sociedad en su conjunto incluso en cuestiones tan prácticas y tan lógicas como puede ser los avisos por emergencia por un posible desastre natural. De hecho, por el momento, la DANA ha dejado un saldo de cuatro fallecimientos, tres personas desaparecidas, cientos de personas evacuadas y cuantiosos daños materiales, según reportan diversos medios.
En concreto, en la Comunidad de Madrid se han registrado dos personas desaparecidas. En el municipio de Aldea del Fresno (Madrid) sigue desaparecido un hombre cuyo vehículo fue arrastrado por una riada tras caer el coche al río Alberche. En el coche viajaba su hijo, un niño de 10 años que fue finalmente rescatado por los servicios de emergencia después de que fuera encontrado encaramado a un árbol. En Villamanta, un hombre de 83 años con demencia fue arrastrado por la corriente y todavía no ha sido encontrado. Los Bomberos de la Comunidad de Madrid habrían realizado casi 1.300 intervenciones en total.
Jefe de Redacción de Al Descubierto. Psicólogo especializado en neuropsicología infantil, recursos humanos, educador social y activista, participando en movimientos sociales y abogando por un mundo igualitario, con justicia social y ambiental. Luchando por utopías.