Desokupa firma un acuerdo con un sindicato de la policía para “formar” a 30.000 agentes

El Sindicato Unificado de la Policía (SUP) ha anunciado un acuerdo con la empresa Desokupa, dirigida por Daniel Esteve, para formar a 30.000 agentes en técnicas de defensa personal. Este convenio, que se ha hecho público a través de un vídeo en redes sociales, busca según lo expuesto “reforzar la seguridad y habilidades de los agentes ante el aumento de la violencia en las calles”.

La secretaria general del SUP, Mónica Gracia, ha calificado este acuerdo como un «momento histórico», subrayando la necesidad de mejorar la seguridad de los policías ante la creciente inseguridad ciudadana, pese al contexto donde la tasa de delincuencia se mantiene estable y esta es a su vez de las más bajas del mundo.

«Tenemos un problema en las calles. Hay una violencia desmedida y la autoridad se ha perdido. Los compañeros están cada vez más en riesgo y queremos que se sientan más seguros», explicó Gracia. Por su parte, Daniel Esteve, en su declaración, señaló que el curso será intensivo y abarcará la participación de hasta 500 policías a la vez, con un equipo de 18 formadores. El curso incluirá clases teóricas y prácticas sobre técnicas de defensa personal, uso de porras extensibles, esposamiento de detenidos y el denominado «grappling policial», una técnica que combina diversas maniobras de lucha para inmovilizar a una persona.

Esteve, conocido por su afiliación ultraderechista, la participación de neonazis en sus empresas y sus métodos para desalojar viviendas ocupadas, aseguró que su empresa cuenta con las instalaciones necesarias y la colaboración de 150 gimnasios en toda España para llevar a cabo los cursos. Según el acuerdo, la formación será accesible a todos los afiliados del sindicato y sus familiares directos, con un costo aún por definir, pero que oscilará entre 15 y 20 euros para las clases online y 50 euros por ocho horas de prácticas presenciales.

El Ministerio del Interior se plantea impugnar el acuerdo

El anuncio del acuerdo ha generado una rápida reacción por parte del Ministerio del Interior, que dirige Fernando Grande-Marlaska. A través de un comunicado, el Ministerio ha aclarado que la formación propuesta por Desokupa no cuenta con el respaldo de la Dirección General de la Policía. La policía ha aclarado que no es homologable ni puntuable para la promoción interna de los agentes. Además, han subrayado que la formación oficial de la Policía Nacional debe ser impartida exclusivamente por la División de Formación y Perfeccionamiento y el Centro Universitario de la Policía Nacional.

El Ministerio del Interior está evaluando la apertura de un expediente para impugnar el convenio, argumentando que podría contravenir los valores democráticos que la institución debe defender. «Toda la formación evaluable que reciben los agentes debe realizarse dentro del marco establecido por la Dirección General de la Policía», señala el comunicado. También se ha comprometido a garantizar que cualquier formación externa, aunque no sea reglada ni tenga valor académico, respete plenamente los valores democráticos y los principios constitucionales.

El acuerdo ha generado también reacciones dentro de otros sindicatos policiales. La Unión Federal de Policía, por ejemplo, expresó su preocupación a través de su cuenta oficial en X, señalando que el convenio podría dañar la imagen de la Policía. La controversia se intensifica debido al perfil ultraderechista de Daniel Esteve y las críticas recurrentes que realiza en redes sociales contra la izquierda y amplios grupos sociales.

Desokupa: escuadristas del S.XXI

Desokupa, la empresa que lidera Daniel Esteve, se ha hecho conocida en España por su enfoque que presuntamente estaría rayando la ilegalidad para desalojar viviendas ocupadas. La empresa ha sido señalada por el uso de métodos de intimidación y presión para lograr que los okupas abandonen los inmuebles sin necesidad de intervención judicial. Sus operaciones han sido aplaudidas por algunos sectores de la sociedad, especialmente en foros de extrema derecha, pero también han sido objeto de denuncias y críticas por sus tácticas y por la falta de un marco legal que respalde sus acciones.

Daniel Esteve, figura central de Desokupa, ha mantenido una presencia activa en redes sociales, donde documenta sus operaciones y lanza duras críticas contra el gobierno y partidos de izquierda. Recientemente, antes de las elecciones generales, colocó una pancarta en Madrid con un mensaje provocador dirigido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, donde ponía que Desokupa iría la Moncloa, mostrando las ambiciones políticas de Esteve, que hasta hace poco compartría espacio con el ahora eurodiputado Álvise Pérez.

Desokupa es conocida por tener neonazis y ultraderechistas en nómina, además de utilizar en sus comunicados el lenguaje propio de la ultraderecha, además de distintos bulos como el de una supuesta anciana a la que su cuidadora ocupó la casa y que resultó ser la legítima inquilina del piso, que la anciana estaba realquilando ilegalmente al ser de renta antigua.

El SUP, por su parte, ha seguido justificando su acuerdo por la necesidad de mejorar la formación de los agentes: «Nosotros no pedimos afiliación política a nadie. Firmamos con quien creemos que puede ayudarnos a mejorar la formación que los agentes reciben de la Dirección General de la Policía y del Ministerio del Interior», declaró un miembro de la ejecutiva del sindicato. Una peligrosa alianza con una empresa abiertamente extremista que recuerda a los escuadristas fascistas del siglo pasado y que pone en tela de juicio cualquier intento de neutralidad policial.