La Mesa del Congreso aprueba investigar la presencia de la extrema derecha en las Fuerzas Armadas

El Mesa del Congreso califica la petición cursada por ERC, Junts, Bildu, la CUP y el BNG para crear una comisión de investigación que evalúe la presencia de la extrema derecha en el seno de las Fuerzas Armadas. Con el voto en contra de Vox y el PP, dicha comisión tendrá el cometido de sondear, en concreto, los posibles vínculos del Ejército con el partido presidido por Santiago Abascal y otros similares, así como las “eventuales intromisiones, injerencias e influencia” de la ideología ultraderechista “por medio de la jerarquía militar, en los poderes Ejecutivo y Legislativo”.

Según informaban a Público, la admisión a trámite de esta propuesta ha sido posible gracias a la mayoría que tienen PSOE y Unidas Podemos, que cuentan con seis miembros en la Mesa, frente a los tres representantes con que cuentan PP y VOX –dos y uno respectivamente–.

Por tanto, la tramitación de esta iniciativa queda ahora en manos de la Junta de Portavoces, a la cual ha trasladado su acuerdo el órgano de Gobierno de la Cámara Baja “para su eventual inclusión en el orden del día de una sesión plenaria” si lo considera oportuno, conforme al artículo 52 del Reglamento.

La investigación sobre la extrema derecha en las Fuerzas Armadas

Los diversos partidos independentistas con representación parlamentaria en el Congreso, junto con el BNG, pusieron en marcha esta petición el pasado martes tras las múltiples informaciones sobre militares, mayormente en la reserva, que, además de haber criticado a estas formaciones y al Gobierno a través de manifiestos, cartas públicas y chats privados, han defendido el régimen de la dictadura franquista y llegado a hablar de pronunciamientos militares y de fusilamientos de millones de ciudadanos.

De este modo, los grupos independentistas, quienes han acusado a la ministra de Defensa, Margarita Robles, de minimizar la situación, consideran que existe “una presencia extensa de la extrema derecha franquista” dentro del Ejército, cuya voluntad es intervenir “constantemente” en las decisiones que se toman “a menudo con altavoces políticos de primera línea”.

Mientras que los servicios jurídicos del Congreso no se han opuesto a la calificación, el vicepresidente cuarto de la Mesa, el representante de Vox Ignacio Gil Lázaro, ha destacado que el artículo 52 del Reglamento del Congreso establece que las comisiones de investigación deben versar sobre asuntos “de interés público”, lo cual “requiere la existencia de un hecho objetivo y constatado, apreciado en la realidad”.

En consonancia con esto, Gil Lázaro ha argumentado que “la pretensión del grupo proponente es un puro desideratum y es ofensiva para la acreditada lealtad constitucional de nuestras Fuerzas Armadas”.

Asimismo, el representante de Vox también ha replicado el criterio de los letrados que pedían a su formación reformular la solicitud registrada para que la vicepresidenta primera y responsable de Memoria Histórica, Carmen Calvo, compareciese para dar explicaciones por el derribo de una cruz de homenaje a los caídos en la Guerra Civil en Aguilar de la Frontera. Así pues, frente a la petición de la Mesa, ha resaltado que “nos hemos opuesto al criterio de los letrados señalando que la protección del patrimonio artístico nacional no es exclusiva de ayuntamientos o comunidades, sino también del Estado y que la petición de Vox era, por tanto, pertinente”.