Bolsonaro, presidente de Brasil, será juzgado por crímenes de lesa humanidad por su gestión de la pandemia

El presidente del Gobierno de Brasil, Jair Bolsonaro, será juzgado finalmente por el Tribunal Permanente de los Pueblos (TPP) por crímenes de lesa humanidad en la gestión ante la pandemia de COVID19 y por ataques contra las minorías y la democracia del país. El juicio se celebrará los días 24 y 25 de mayo en dos lugares a la vez: en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sao Paulo y en Roma, donde se encuentra la sede del TPP.

La denuncia contra el mandatario brasileño fue presentada por numerosas entidades dedicadas a la defensa de los derechos humanos: el Consejo Misionero Indígena (CIM), la Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB), la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos Dom Paulo Evaristo Arns o la Internacional de Servicios Públicos. Tras la aceptación de la misma, fue entregada al Ministro de Relaciones Exteriores y al propio Bolsonaro.

Bolsonaro señalado por varios crímenes

El Tribunal Permanente de los Pueblos es un órgano creado en 1979 que se encarga de juzgar crímenes relacionados con la vulneración de los Derechos Humanos. El juicio contra Bolsonaro se celebrará en la sesión 50 del TTP y contará con un jurado conformado por 12 personas y un representante. La acusación será leída por la abogada Eloisa Machado, representante a su vez de la Fundación Getulio Vargas de Sao Paulo, frente a una audiencia de 130 personas designadas por el Consejo de la Fundación Internacional Lelio Basso y la Liberación de los Pueblos.

Sin embargo, el TTP es un tribunal de opinión sin validez jurídica, no es la primera vez que el mandatario brasileño es señalado por estos mismos crímenes. El pasado mes de octubre de 2021, la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI), estuvo 6 meses ha reunido pruebas, testimonios y documentos para elaborar un informe donde acusaba a Bolsonaro ante el Senado de Brasil por hasta 9 crímenes, incluyendo la gestión de la pandemia.

El Senado de Brasil, con 7 votos a favor y 4 en contra, tras una intensa jornada de más de 10 horas de discursos y declaraciones, finalmente condenó a Bolsonaro por diferentes delitos: infracción de medidas sanitarias preventivas, charlatanismo, incitación al crimen, falsificación de documento particular, uso irregular de recursos públicos y prevaricación, así como crímenes de responsabilidad y contra la humanidad.

La denuncia fue, además, enviada a las altas instancia, es decir, la Fiscalía General del Estado y el Supremo Tribunal Federal de Brasil. Más tarde, la acusación se elevó al Tribunal Penal Internacional con sede en La Haya.

Aunque estas acusaciones y la resolución de la comisión del Senado sí que tuvieron mayor repercusión y podrían derivar en consecuencias jurídicas y políticas, el proceso penal es largo y todavía no ha habido ninguna conclusión al respecto. Por otro lado, el próximo mes de octubre se celebran elecciones en Brasil, en las cuales Bolsonaro se enfrentará a la candidatura de Lula da Silva, partiendo de una clara desventaja debido precisamente a sus múltiples escándalos.

No obstante, parece poco probable que estas acusaciones se resuelvan jurídicamente antes de los comicios.