Tres fuerzas de extrema derecha irrumpen en el parlamento griego

El domingo pasado se celebró la repetición de las elecciones parlamentarias en Grecia, donde el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, ha revalidado el mandato después de que su partido, Nueva Democracia (ND), obtuviera el 40,56% de los sufragios y 158 escaños del total de 300 del parlamento griego, 12 más que las elecciones pasadas. Así, el partido conservador se alza con la victoria, relegando a SYRIZA de Alexis Tsipras al 17,85% de los votos y 48 escaños, mientras tres fuerzas de extrema derecha obtuvieron representación en el Consejo de los Helenos.

En estos comicios, además, las fuerzas de izquierda fueron las más perjudicadas. En tercer lugar quedó el Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK) con el 11,85% de los votos y 32 escaños perdiendo 9, seguido del Partido Comunista Griego (KKE) con el 7,69% de los sufragios y 20 asientos. Esto contrasta con la irrupción de tres fuerzas de extrema derecha: Espartanos, que debuta con el 4,64% de los votos y 12 escaños; Solución Griega (EL), que pasa de 16 a 12 escaños con el 4,44% de los votos; y Movimiento Patriótico Democrático – Victoria (Niki), que se estrena con 10 escaños y el 3,70% de los votos.

Así, el espacio de ultraderecha, a pesar de presentarse por separado, supera al tradicional partido socialdemócrata de Grecia, el PASOK, y constituirán una fuerza relevante en el parlamento helénico, si bien Mitsotakis no necesitará apoyos externos al haber obtenido mayoría absoluta gracias a los 50 escaños extra que la ley electoral griega otorga al ganador de las elecciones. La repetición electoral se sucedió después de que en mayo no consiguiera llegar a ningún acuerdo con las otras fuerzas políticas tras quedarse a cinco escaños de la mayoría absoluta.

La extrema derecha en Grecia: la estela de Amanecer Dorado

La sociedad griega ha apostado fuerte por la línea conservadora y por dar cabida a hasta tres partidos de extrema derecha, conformando una rara avis en Europa. De hecho, no hay ningún país en el viejo continente que tenga representación de tres fuerzas de este lado del espectro, a excepción de Bulgaria antes de que perdieran toda su representación en las últimas elecciones. Sí que hay países con dos partidos de extrema derecha, como es el caso de Italia, Hungría, Polonia, Países Bajos o Rumanía, entre otros.

Y es que en Grecia, el partido neonazi Amanecer Dorado llegó a tener 21 escaños en el Consejo de los Helenos y alzarse como tercera fuerza muy a pesar de sus modos violentos y agresivos y su relación con el mundo del crimen, lo que llevó en última instancia a su disolución en 2020.

Sin embargo, muy pronto otros partidos políticos de extrema derecha recogerían el testigo. El tradicional partido de extrema derecha en Grecia siempre había sido Concentración Popular Ortodoxa (LAOS), una escisión de Nueva Democracia que tuvo como precedente el grupo Frente Helénico. Vinculado con el periodo dictatorial de Grecia en los años 60 y 70 conocido como la dictadura de los Coroneles, este partido ultranacionalista fue aplastado por Amanecer Dorado y condenado al extraparlamentarismo incluso tras haber formado parte de un gobierno de coalición en 2011.

Solución Griega se funda en 2016 por parte de Kyriakos Velopoulos como una escisión de este partido. De tendencia rusófila y afín al cristianismo ortodoxo, debutó en las elecciones de 2019 con 10 escaños coincidiendo con la pérdida de toda la representación de Amanecer Dorado, llegando a los 16 en las elecciones de mayo de 2023. Contaron un diputado en 2017 que era tránsfuga de Amanecer Dorado.

Un año después, en 2017, Vasilis Stigkas, quien también pasó por ND y LAOS, fundó su propio chiringuito: Espartanos, que en 2020 consiguió reunir a su alrededor a otras pequeñas formaciones de extrema derecha de distinta tendencia.

Analistas consideran que esta formación, de tendencia neofascista, es la que intenta recoger el testigo directo de Amanecer Dorado aprovechándose de las formas y el discurso de la «derecha alternativa» estadounidense. No en vano, su fundador logró su fama gracias a un programa de entrevistas en YouTube en los cuales apoyó explícitamente al grupo neonazi Conciencia Nacional Popular.

De hecho, la polémica que más ha salpicado a Espartanos es su vínculo con Griegos por la Patria, la refundación de Amanecer Dorado, ilegalizada finalmente en 2023 poco antes de las elecciones de mayo del mismo año. No solo miembros de este partido apoyaron a Espartanos (especialmente tras su ilegalización), sino que se detectaron que al menos 10 miembros de las listas electorales de Espartanos en las elecciones legislativas pasadas eran afiliados a Griegos por la Patria. Pese a ello, el Tribunal Supremo de Grecia dejó a Espartanos presentarse a los comicios.

El Movimiento Patriótico Democrático – Victoria (Niki), fundado en 2019 por Dimitris Natsios, es el más nuevo de todos. Su lema «Fe, Nación, Familia» ya da una idea de sus tendencias ultracatólicas, si bien ha destacado por un fuerte discurso antiinmigración. También se hizo conocido por su tradicionalismo, oponiéndose a la educación sexual o al aborto, así como a la vacunación durante la pandemia de COVID19. Polémico ha sido también su apoyo al militarismo, llegando su líder a decir que el conflicto geopolítico que mantienen con Turquía solo podrá resolverse mediante la fuerza.

Así, Grecia se convierte en un país donde la extrema derecha tiene representación en muy buena parte de sus facetas, desde la más amplia y moderada, hasta la más dura, llegando entre todas estas fuerzas políticas a superar lo que una vez fue Amanecer Dorado.

El retroceso de la izquierda

Por otro lado, cada proceso electoral ahonda todavía más en la caída de los partidos políticos de izquierda. La Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA) de Alexis Tsipras, que llegó a gobernar Grecia entre 2015 y 2019 con la misión de hacer frente a las políticas neoliberales impuestas desde Europa, si bien continúa manteniéndose como primera fuerza, ha pasado de 86 escaños en 2019 a los 48 actuales.

La escisión de SYRIZA, El Frente Europeo de Desobediencia Realista (MeRA25), fundado por el ex ministro de Finanzas Yanis Varoufakis, conocido por su férrea oposición a las políticas de recortes presupuestarios y perteneciente al movimiento europeo izquierdista Movimiento Democracia en Europa 2025 (DiEM25) creado por él mismo, se ha quedado sin representación al perder los 9 escaños que tenía.

Por su lado, el KKE, uno de los partidos comunistas con más fuerza en Europa, sigue acumulando retrocesos, pasando de 26 a 20 asientos y volviendo a ser superado por el PASOK, si bien continúa manteniéndose como uno de los partidos políticos más importantes de Grecia.

Grecia queda de forma más clara a merced de un ciclo político donde los partidos conservadores y los de extrema derecha han tomado la delantera y donde los partidos políticos del ala izquierdista (y también los más moderados) deberán repensar sus proyectos y estrategias.