Los disturbios alentados por agrupaciones ultraderechistas agitan las calles de toda España

Los disturbios promovidos por la extrema derecha se multiplican en ciudades de toda España. Barcelona, Madrid, Murcia, Burgos o Bilbao constituyen ejemplos de las protestas que han provocado mayores estragos. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha calificado los destrozos en la vía pública y la quema generalizada de contenedores como “intolerable”, además de “violenta a irracional”.

Por su parte, el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, ha comprado los altercados en España con la “estrategia de tensión” en Italia y ha acusado a las organizaciones ultraderechistas de promover los disturbios “tirando la piedra y escondiendo la mano”.

El fin de semana en que se celebra la noche de Todos los Santos representó el terror de forma poco común en un año marcado por la crisis sanitaria a escala global. En España, cientos de manifestantes convocados por agrupaciones de ultraderecha a través de las redes sociales de Internet organizaron batallas abiertas contra el mobiliario público y las fuerzas de seguridad. Según datos de la policía, se pueden contabilizar alrededor de medio centenar de detenidos, de los cuales más de 30 fueron apresados en Madrid.

Barcelona

En la capital catalana, los Mossos d’Esquadra afirman que durante el fin de semana detuvieron a personas con perfiles muy diferentes, así como con ideologías muy diversas. No obstante, el director general del cuerpo, Pepe Ferrer, ha declarado que las primeras investigaciones policiales señalan a “grupos de extrema derecha muy violentos y organizados”.

Paralelamente, el comisario jefe de los Mossos, Eduard Sallent, ha confirmado que en los altercados del fin de semana contra las restricciones impuestas para frenar la expansión de Covid19: “detectamos a personas de la extrema derecha y radicales del fútbol, y algunas de estas personas fueron detectadas de nuevo el sábado, y a través del seguimiento y filtros pudimos neutralizar sus acciones”.

De igual forma, Sallent ha anunciado que reforzarán los cuerpos de seguridad con más efectivos para las próximas manifestaciones que se convoquen contra las restricciones, ante “la intensidad de la violencia ejercida”. De hecho, pese a tratarse de los primeros incidentes remarcables, la protesta se situó en el nivel 2 de riesgo y tuvieron que enviar antidisturbios de la Brigada Móvil (Brimo) y del Área de Recursos Operativos (Arro) para frenarla.

El viernes, tras una concentración en la plaza Sant Jaume en la que se reunieron alrededor de 1.500 personas, unos 50 manifestantes saquearon dos tiendas del centro de la ciudad, hicieron barricadas, quemaron contenedores, lanzaron vallas, petardos y botes de humo contra la policía. Estos actos de vandalismo supusieron para los detenidos estar denunciados por participar en desórdenes públicos y atentar contra agentes. Además, un par de personas se negaron con insistencia a ser identificados.

La próxima manifestación ya está convocada para el próximo jueves en la plaza Urquinaona de Barcelona. Ante este llamamiento, Sallen ha asegurado que “harán el seguimiento conveniente”.

Madrid

Durante la noche del sábado, decenas de personas intentaron cortar a última hora la Gran Vía de Madrid mediante la quema de contenedores y la formación de barricadas. Previamente, la Puerta del Sol había albergado una manifestación convocada bajo el lema “Salimos a la calle, el pueblo está cansado”. Una vez desalojada la protesta a las diez de la noche, alrededor de cien asistentes se trasladaron a la Plaza de Ópera para expresar sus quejas contra el Gobierno de Pedro Sánchez. Finalmente, unas cuantas decenas se dirigieron a Plaza España, donde tuvo lugar el inicio de los altercados.

Esta marcha convocada por redes sociales también ha provocado estragos en el mobiliario de la principal vía madrileña, además de escaparates rotos en algunos comercios contra los que lanzaron piedras. La Policía Nacional disolvió esta concentración violenta y no escapó de los objetos arrojadizos, contabilizando entre sus filas a 3 agentes heridos.

Murcia

En esta Comunidad Autónoma los manifestantes gritaban “arriba España” mientras que desde algunas ventanas les respondían con insultos como “gilipollas”. El escritor Miguel Ángel Hernández opinaba al respecto de estos sucesos lo siguiente: “Pues lo mismo lo del toque de queda tiene sentido y a esa hora hay algo en las calles que te vuelve subnormal profundo. Como a los de anoche. El virus de la imbecilidad. Para ese no hay cura ni vacuna”.

Tanto en la ciudad de Murcia como en Cartagena las convocatorias se llevaron a cabo a través de Internet. Según cálculos de los cuerpos de seguridad, el grupo que organizó los disturbios en Murcia para quemar mobiliario urbano y arrojar contenedores de vidrio a lo largo y ancho de la calzada urbana estaría compuesto por unas treinta personas y manifestó su intención de “volver a liarla” otra noche.

Tanto los efectivos del Grupo Especial de Seguridad Ciudadana (GESC) de la Policía Local como los de la Policía Nacional tuvieron que emplearse a fondo para contener a los manifestantes violentos y frenar los destrozos de mobiliario público apagando los fuegos de contenedores en llamas. En esta ciudad hay al menos un detenido.

Por su parte, en Cartagena los cuerpos de seguridad han detenido a tres personas tras el aviso que recibieron los cuerpos de Policía Nacional y Local de una convocatoria a través de Instagram para concentrarse en el centro de la ciudad y “liarla esta noche”, a imagen y semejanza de los altercados violentos en Burgos y en Barcelona. Los agentes pidieron la identificación a los jóvenes que acudieron a la concentración y, tras una fuerte discusión y algún forcejeo que implicó las detenciones descritas, los adolescentes se fueron dispersando.

La Rioja

La tarde del sábado terminó en Logroño con altercados violentos y el saqueo de tiendas en otra jornada de disturbios. La manifestación convocada extraoficialmente y sin autorización de la Delegación del Gobierno regional, a la que acudieron alrededor de 150 personas, derivó en mobiliario urbano destrozado, contenedores incendiados y una lluvia de petardos y bengalas. A raíz de estos acontecimientos hay varios heridos que posteriormente han colapsado las urgencias médicas y una tienda totalmente desvalijada por la cual se lamenta su propietaria.

Posteriormente, durante la noche del domingo al menos cuatro personas más fueron detenidas tras la nueva quema de contenedores. Estos jóvenes se unen a los 8 detenidos con anterioridad durante el fin de semana.

Por su parte, los ultraderechistas de Vox en La Rioja se hacían eco de los actos violentos en medio de la tensión suscitada y aprovechaban el contexto para pedir a los cuerpos de seguridad del Estado, de forma extremadamente hipócrita, “que detengan a los izquierdistas y menas que provocan altercados”.

De hecho, el candidato a la alcaldía de Logroño, Adrián Belaza, publicó un tweet tan polémico a raíz de los incidentes que tuvo que borrarlo a continuación. El escrito decía: “Ojo que nos inculpan a Vox la convocatoria de actos violentos en Logroño esta tarde, vamos como ayer en el Decathlon en los que también estábamos robando bicicletas junto a Hussein y Mohamed”.

Según el registro de la Consejería de Servicios Sociales de La Rioja, la comunidad acoge actualmente a siete menores extranjeros no acompañados, cuya tutela es del Gobierno regional. Todos ellos se encuentran escolarizados y no participaron en los disturbios.

País Vasco

El País Vasco no salió indemne de los disturbios dispersos por el país y hubo altercados en sus tres capitales. En Bilbao, la Ertzaintza detuvo a seis personas el jueves por la noche tras la quema de una veintena de contenedores de basura una vez finalizadas las protestas al grito de “libertad” contra el toque de queda y el resto de medidas adoptadas para frenar el avance del coronavirus.

La concentración, que no había sido comunicada a las autoridades, dio comienzo a las nueve y media de la noche en la plaza Indautxu. La actitud violenta de los participantes, demostrada por el lanzamiento de botellas, piedras y petardos contra las fuerzas de seguridad, provocó que los agentes antidisturbios tuvieron que intervenir.

Castilla y León

También en León, los manifestantes que el domingo acudieron a la convocatoria para entonar quejas contra las restricciones impuestas por el Gobierno de Pedro Sánchez terminaron volcando vallas y encendiendo bengalas que lanzaban a la calzada mientras gritaban en favor de la “libertad”. Además, un grupo de jóvenes lanzó sillas de una terraza situada frente a la catedral por los aires. Por el momento no se ha informado de detenciones, aunque se desplegaron dispositivos de la Policía Nacional y Local para contener a los jóvenes.

Por otro lado, durante la madrugada del viernes la ciudad de Burgos vio arder contenedores y fue testigo de intensos enfrentamientos entre la policía y los jóvenes durante los disturbios. Un hecho destacable en torno a dichos disturbios es que sirvió para retratar a los miembros de Vox, quienes antes de contrastar nada ya estaban publicando en Twitter opiniones contradictorias: algunas a favor y otras en contra, según asumieran que los altercados habían sido patrocinados o no por la izquierda.