«Quieren implantar el Nuevo Orden Mundial»: así es la plataforma de empresarios detrás de la huelga del transporte que apoya a Putin
El pasado lunes 14 de marzo se inició la huelga del transporte en España por parte de un porcentaje reducido del sector. Más concretamente, el paro fue convocado por la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de mercancías por Carretera, que se hace llamar Plataforma Nacional.
El motivo de esta movilización, en boca de sus propios convocantes, tiene que ver con el alza de los precios del combustible, una consecuencia que se deriva de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, entre otros factores, y que está padeciendo toda Europa, amenazando con una recesión económica, especialmente si se suma la subida del precio de la electricidad, que está alcanzando también máximos históricos.
Las principales plataformas y agrupaciones del sector del transporte han decidido sentarse a negociar con el Gobierno para plantear posibles medidas, como es el caso de la Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC, la principal patronal del transporte) o la Confederación Española del Transporte de Mercancías (CETM). En sus comunicados, señalan que la Plataforma Nacional plantea un paro indefinido y «sin objetivos», que entienden podría terminar de desestabilizar el país cuando todavía queda margen de actuación, por lo que por el momento no se suman a la huelga del transporte.
Sin embargo, dicha plataforma, que agrupa a unos 4.000 asociados (25.000 según cifras de la propia plataforma), ha decidido seguir adelante, con algunos apoyos dispersos, como es el caso de la Asociación Empresarial de Transportes Discrecionales de Mercancías de Aragón (Tradime) o la Confederación de Empresarios y Autónomos de Extremadura (CEADE). Sin embargo, parece que el balance por el momento es de baja incidencia y con algunos episodios polémicos, como un herido de bala en un forcejeo con la policía, según Agencia Efe.
«Biden está detrás del sionismo satánico»
Más allá del débil apoyo a la huelga, de los nulos objetivos planteados o de la escasa planificación, la Plataforma Nacional ha destacado por las polémicas declaraciones que José Fernández, su coordinador en Asturias y a su vez uno de los portavoces, hizo en una entrevista en exclusiva para El Plural, donde hizo gala de un discurso negacionista y de adhesión a las teorías de la conspiración propias de la extrema derecha, además de mostrar su apoyo a Putin, el mandatario ruso.
«Quieren echar la culpa a Putin de los problemas que tenemos en España. Pero Putin está a miles de kilómetros.«, respondió José Fernández cuando se le preguntaba por las causas de la subida de precio de los combustibles, argumentando que es algo «provocado desde el Ministerio».
Seguidamente, aunque aseguró que no apoyaba a Putin, llamó «nazi» a Volodimir Zelenski, presidente del gobierno de Ucrania. «¿Sabes lo que está pasando en Ucrania con ese nazi de Zelenski que tenía laboratorios de armas biológicas para matar a la mitad de la humanidad?¿Sabes eso?», afirmó, dando pábulo a la conspiración que ha recorrido estos días acerca de la existencia de armas biológicas creadas por EEUU en Ucrania y que ha sido apoyada tanto por el gobierno de Rusia como por grupos de QAnon, la metateoría de la conspiración que esgrimen quienes apoyan a Donald Trump.
«Yo no defiendo a Putin. Yo defiendo la legalidad y no el Nuevo Orden Mundial que nos quieren implantar«, continuó, citando esta vez la conspiración acerca de un supuesto gobierno en la sombra que busca implantar un «nuevo orden» global y que tiene su origen en teorías de la conspiración antisemitas.
Cuando desde el periódico le preguntaron acerca de Putin y su responsabilidad en la subida del precio del petróleo, José Fernández salió en su defensa: «¿Por qué le cortaron la entrada del petróleo ruso?¿Para que le ponen imposiciones?¿Porque no le interesa a los americanos y al baboso ese que tienen de presidente, Biden, que está detrás de él el sionismo satánico?», espetó, sentenciando poco después que «no se puede echar la culpa a Rusia».
La huelga y la herencia del ‘Freedom Convoy’
Hace semanas, en Canadá, Estados Unidos e incluso Europa, estaba mucho más centrada en cómo el movimiento negacionista de la pandemia y antivacunas, alimentado por el trumpismo y la extrema derecha (cuando no directamente organizado y capitaneado por ella), amenazaba con dificultar una salida óptima de la crisis sanitaria.
La mención a Canadá en el párrafo anterior se debe precisamente a que este país fue uno de los que más sufrió las consecuencias de este negacionismo ante el desarrollo del «Freedom Convoy» (Convoy de la Libertad, en castellano), una protesta contra el gobierno canadiense por la obligatoriedad de los camioneros a vacunarse que, aunque tuvo un apoyo mínimo, consiguió paralizar las principales ciudades del país, y principalmente Ottawa, con episodios de vandalismo que llevaron al presidente del gobierno, Justin Trudeau, a aplicar la Ley de Emergencia por primera vez en la historia del país.
Pronto, lo que se disfrazaba de protesta por la «libertad», se reveló estar financiada principalmente por la extrema derecha estadounidense, seguida de la canadiense. Las declaraciones de sus portavoces, muy similares a las de José Fernández, también hacían referencia a las conspiraciones alentadas desde la extrema derecha. Además, coreaban lemas y portaban símbolos no ya trumpistas, sino directamente nazis.
Para mediados de febrero, el movimiento había llegado a Europa y se tradujo en algunos bloqueos en Francia o Bélgica, pero con poco éxito. Sin embargo, a pesar de que el aparentemente cercano fin de la pandemia y la guerra en Ucrania han terminado por socavar un movimiento que no tuvo sentido desde el principio, la Plataforma Nacional ha recogido inequívocamente el mismo espíritu y aprovecha la coyuntura para lanzarse contra el Gobierno de España, esgrimiendo discursos y argumentos similares.
Enlaces y fuentes:
– Foto de portada: Camioneros en huelga. Autor: Víctor Honorato, 15/12/2021. Fuente: elDiario.es (CC BY-NC 4.0)
Jefe de Redacción de Al Descubierto. Psicólogo especializado en neuropsicología infantil, recursos humanos, educador social y activista, participando en movimientos sociales y abogando por un mundo igualitario, con justicia social y ambiental. Luchando por utopías.