Derrota para Milei: la “ley ómnibus” no consigue el apoyo del Congreso
El Congreso argentino ha rechazado la “ley ómnibus” propuesta por Javier Milei, un revés significativo que devuelve el proceso legislativo al punto de partida. Esta decisión, tomada en la tarde del martes, representa un fracaso rotundo para el gobierno de Milei, que ha estado en el poder durante casi dos meses sin lograr avanzar con su agenda de privatización y eliminación del Estado argentino.
La vuelta a comisiones de la “ley ómnibus”, decidida por la Cámara de Diputados, ha sido recibida con fuertes críticas por parte del partido de Milei, que ha denunciado una traición por parte de los bloques de la oposición con los que el oficialismo estaba negociando el texto. Oscar Zago, jefe del bloque de La Libertad Avanza, responsabilizó a los llamados ‘dialoguistas’ por votar en contra de lo negociado previamente, lo que ha llevado a un estancamiento en el proceso legislativo, principalmente miembros de la Unión Cívica Radical (UCR) y gobernadores.
La decisión de volver el proyecto se produjo después de un intenso debate en el pleno, caracterizado por varios recesos solicitados para negociar aspectos clave del texto, como el capítulo de privatizaciones. Sin embargo, tras cinco horas de debate, solo se logró votar seis artículos antes de que se tomara la decisión de regresar el proyecto a las comisiones pertinentes.
Además, la moción de vuelta a comisión y el levantamiento de la sesión se produjeron después de un cuarto receso de 15 minutos (que terminó siendo de 45) solicitado para negociar el capítulo de las privatizaciones y después de que varias votaciones de artículos fueran rechazadas por falta de apoyo.
Este revés representa una clara muestra de la falta de consenso y de la división en el Congreso argentino, lo que plantea serias dudas sobre la capacidad del gobierno de Milei para avanzar con su agenda legislativa pese a la ayuda de Mauricio Macri y la bancada de Juntos por el Cambio (JxC). El enfado de Milei hizo que subieran una “lista negra” con los diputados que votaron en contra desde la Oficina del Presidente.
Los superpoderes antidemocráticos de la “ley ómnibus”
La “ley ómnibus” le otorgaba a Milei superpoderes en diversas materias para tomar decisiones desde la Casa Rosada sin pasar por el Congreso ni por los canales administrativos habituales. Esta medida generó una gran controversia, ya que implicaba un considerable aumento en la concentración de poder en manos del presidente., rompiendo la separación de poderes propia de las democracias (ejecutivo, legislativo y judicial).
El proyecto original, con 664 artículos, era ambicioso y heterogéneo, abarcando desde reformas electorales hasta cuestiones judiciales. La reducción a 386 artículos durante las negociaciones evidencia la resistencia y las discrepancias con la oposición, que forzó modificaciones importantes.
Además, la eliminación de todo el capítulo de medidas fiscales del texto original por parte del ministro de Economía, Luis Caputo, refleja la presión ejercida por diversos sectores y la única urgencia del gobierno de aprobar la ley para disponer de poderes de emergencia.
Incertidumbre, rechazo popular a la ley y venganza ultra
La derrota en el Congreso revela la incapacidad del gobierno de Milei para generar acuerdos con la oposición y plantea dudas sobre el futuro de su gestión. Este proceso lo vivieron otros líderes autoritarios como Donald Trump y Jair Bolsonaro, intentando imponerse en sus respectivos congresos sin contar con una mayoría de votos que les apoyasen (esto pasó así con Trump pese a la mayoría republicana). La “ley ómnibus”, además, se enfrenta ahora a una fuerte resistencia y desaprobación popular, manifestada a través de protestas en las calles y paros generales convocados por los sindicatos.
Este rechazo popular se fundamenta en el temor a las consecuencias de la desregulación propuesta por la “ley ómnibus”, que podría exacerbar la desigualdad económica y social en el país. Además, las concesiones realizadas por Milei en relación con la privatización de empresas estatales han generado preocupaciones sobre la pérdida de empleos y el acceso a servicios públicos esenciales.
Por su parte, los miembros de LLA y sus comunicadores en redes han acusado de traidores a los diputados que votaron en contra, pidiendo la eliminación de sus partidos en las elecciones de 2025 y la persecución social de estos dirigentes.
Otras de las principales cuentas de la extrema derecha libertariana señalaron a la UCR como los nuevos enemigos de LLA. Una de estas cuentas es la de Juan Doe de la Derecha Diario, uno de los nuevos medios de extrema derecha de América Latina, que esconde con anonimato a sus miembros y redactores, mientras mantiene un gran tamaño y presumiblemente financiación privada, guardado con el mayor de los secretismos.
Otros de estos comunicadores, llamaban a una “guerra” contra las provincias y los gobernadores, obviando que dejar sin dinero a las provincias es dejar sin servicios a sus habitantes, una táctica que posiblemente restaría popularidad al gobierno estatal.
De esta manera, Javier Milei y su bancada demuestran que sus intentos de acaparar el poder de manera autoritaria no están funcionando como pensaban y que la presión, intimidación, bulos y ataques que son el día a día en redes, no sustituyen las leyes, el dialogo y las instituciones democráticas. Algo que los amateurs de la nueva ultraderecha están tardando en aprender.
Director de Al Descubierto. Estudiante de Ciencias Políticas y máster en Política Mediática. Apasionado del estudio y análisis del hecho político, con especial interés en el fenómeno de la extrema derecha, sobre la que llevo formándome desde 2012. Firme defensor de que en política no todo es opinable y los datos, fuentes y teorías de la ciencia social y política deben acompañar cualquier análisis.