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Desmontando a Jusapol

Artículo original de Eulixe: Desmontando a Jusapol

Jusapol es una asociación española formada por agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil. A pesar de que en su manifiesto fundacional declaran que no son afines a ningún partido político y que persiguen solamente la equiparación salarial entre los diferentes cuerpos de seguridad, su notoria politización política y su deriva radical han quedado patentes en las numerosas manifestaciones públicas efectuadas desde su creación. Un acercamiento a la extrema derecha que resulta especialmente preocupante al tratarse de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Su nombre es un acrónimo de las palabras Justicia Salarial Policial. La asociación fue creada en 2017 en la Comisaria de Policía de la ciudad de Palencia con el objetivo, según la organización, de equiparar los sueldos de la Policía Nacional y la Guardia Civil con el resto de policías autonómicas, como los Mossos d’Esquadra, la Ertzaintza o policías locales.

Aunque en su comunicado fundacional explicaron que no eran afines a ningún partido político ni sindicato y de no habían intereses económicos involucrados (más allá de las mejoras salariales), es notoria la implicación de partidos políticos​ derechistas y ultraderechistas, como Ciudadanos (Cs) y Vox, y de personalidades vinculadas a grupos fascistas o neonazis.

Los actos públicos de Jusapol

El 28 de septiembre de 2017, más de 200 policías y guardias civiles se manifestaron en Barcelona frente a Delegación del Gobierno reclamando la equiparación salarial con los Mossos d’Esquadra. Según algunas fuentes, las consignas más repetidas en la concentración fueron «Más valorados, menos pagados», «Ni un euro menos que a los Mossos», «Con esta placa no se juega», «Estamos hasta los huevos» y «No nos engañe ministro». En principio, frases con sentido dentro de sus reivindicaciones legítimas.

No obstante, en numerosas ocasiones se gritaron sonoros «Viva España», «Viva la Policía» o «Viva la Guardia Civil» o cánticos como «A por ellos» o el clásico «Yo soy español, español». Estas dos últimas hacen alusión específicamente al conflicto surgido a raíz del referéndum (ilegalizado por el Tribunal Constitucional) de independencia de Catalunya del 1 de octubre de 2017, en la que miembros de estos cuerpos de seguridad pública corearon esta frase al ser enviados a reprimir la celebración de dicho referéndum, en lo que ha sido tildado como una muestra de politización y una falta de profesionalidad.


Apenas un mes después, el 6 de octubre de 2017, miles de policías y guardia civiles de toda la geografía española salieron a las calles de Madrid. En la manifestación convocada por Jusapol se gritaron lemas como «No estáis solos» (en referencia a las unidades desplazadas a Barcelona), «Que se vayan, que se vayan los Mossos de allí, que vuelva, que vuelva la Guardia Civil», o «Mosso el que no bote». Y estos fueron solo algunos de los gritos coreados por los agentes, los más numerosos, que en su mayoría portaban banderas de España y vestían camisetas negras con escudos de ambos cuerpos. Una cuestión también criticada por la apropiación política continua que se hace desde diferentes sectores de los símbolos oficiales del estado.


En 2018, los dirigentes de Jusapol negaban rotundamente que Ciudadanos o Sociedad Civil Catalana (SCC, una organización nacida en 2014 para oponerse al independentismo catalán, formada por simpatizantes de PP, Cs y Vox) participasen en la financiación y organización de la gran manifestación de enero en Barcelona. No obstante, según Público, en conversaciones privadas, sus altos cargos de entonces reconocieron abiertamente que Ciudadanos sufragó una parte importante de aquellos gastos y que la SCC fue la que organizó aquella marcha. Según señala el mismo diario, Ciudadanos manipuló a Jusapol para convertirla en una herramienta de Albert Rivera, presidente del partido en aquel momento.


En abril de 2018, Jusapol creó Justicia Policial, Jupol, un sindicato propio con el que poder hacer frente al resto de sindicatos policiales. Y otra asociación similar, Justicia para la Guardia Civil, Jucil. Durante los meses siguientes, hubieron serios enfrentamientos que dichos sindicatos calificaron de «una campaña de descrédito, de ataques, insultos y desinformación atroz, perfectamente dirigida y orquestada desde la organización Jusapol«. Más tarde, fuentes rebelaron que el Gabinete Jurídico Suárez-Valdés estuvo detrás de la hoja de ruta de estos sindicatos, creando una auténtica red con soporte jurídico y económico detrás. Este gabinete es del entonces marido (se separaron en junio de 2020) de la líder de Ciudadanos en Madrid, Begoña Villacís.

El 29 de septiembre de 2018, Jusapol convocó una nueva protesta en Barcelona con el objetivo de homenajear a los miembros de la Unidad de Intervención Policial (UIP, antidisturbios) que cargaron contra los catalanes que se congregaron en torno a las urnas del citado referéndum independentista. Este acto, que se podría definir como una provocación sin relación alguna con su proclamado objetivo laboral, desenmascaró una vez más sus  claras intenciones políticas. Estas cargas policiales fueron duramente condenadas por Europa y otros países y, en septiembre de 2018, todavía pesaban sobre algunos agentes la imputación por el uso desmedido e injustificado de la fuerza.

Cartel de manifestación Jusapol
Cartel de convocatoria a la manifestación del 29/09/2018 en Barcelona.Autor: Jusapol.
Fuente: Cuenta de Twitter @jusapol

Jusapol se quedó sola entre las organizaciones policiales de base al enfrentarse a los cuatro sindicatos del cuerpo (SUP, CEP, UFP y SPP) que tras los disturbios registrados aquella jornada publicaron una nota de prensa conjunta en la que subrayaban lo siguiente:

Las organizaciones sindicales representativas en Unidad de Acción dejan claro su distanciamiento con la convocatoria, por inoportuna, ambigua, y populista, así como por entender que las FFCCSE [Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado] deben estar fuera del debate político, ya que puestas en escena como la de hoy en Barcelona, perjudican el logro de la normalización que, los miembros de la Policía y GC destinados en Cataluña los 365 días del año al igual que el resto de la ciudadanía persiguen.

                    

Sin embargo, a pesar de este rechazo, la reacción de Jusapol fue furibunda. No solo exigieron la «dimisión del Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez», si no que proclamaron también lo siguiente:

En respuesta al escrito presentado por los sindicatos representativos de Policía Nacional (SUP, CEP, UFP y SPP) solicita la dimisión del los cuatro Secretarios Generales, así como que convoquen elecciones en sus organizaciones y saneen sus Comités Nacionales. Y que además se convoquen Elecciones al Consejo de la Policía de forma urgente debido a los conflictos acaecidos.

Declaraciones y reacciones públicas

Es decir, la reacción a la crítica y el distanciamiento de las cuatro organizaciones de Jusapol y la convocatoria por considerarla una politización de un cuerpo público (y también como respuesta a la presunta campaña de acoso dirigida desde Jupol), fue respondida con una petición de una purga interna, simple y llanamente. En una entrevista por un periódico nada sospechoso de tener una línea editorial progresista como La Gaceta, publicó una entrevista a Carlos Morales, ex-portavoz de Jusapol, quien abandonó la asociación en abril de 2018, en la que expresó lo siguiente:

Llevo en Jusapol desde el principio. He luchado y trabajado incesantemente porque creía en el proyecto, que se basaba en tres puntos claves: Jusapol somos todos, Jusapol es apolítico y Jusapol es asindical. Creo que ha perdido la esencia… ya no somos todos -es de unos pocos-, creo que no es apolítico y tampoco sindical.

A partir de la manifestación de Barcelona todo cambió. Algo raro empezó a haber en todo esto. Vi cómo humillaban a las asociaciones y a los sindicatos dejándolos en segundo plano… parecía que se trataba de un acto político más que de una manifestación por la equiparación. Decidí entonces salir de este proyecto porque no veía ni la claridad ni la transparencia que muchos predicaban.

Por si todo lo anterior no fuera suficiente, en las elecciones andaluzas de 2018, no obstante, Jusapol realizó el viraje que parece definitivo. La plataforma dio un respaldo fundamental a la campaña de Vox, donde afirmaban que entre miembros de los distintos cuerpos policiales, familiares, amigos y simpatizantes sumaban 400.000 personas.

Según afirman algunas fuentes, el éxito electoral del partido de extrema derecha se entiende en parte por esta movilización de las redes sociales dirigidas por los activistas ultraderechistas dentro de la Policía Nacional, y la activación de la plataforma Jusapol. De hecho, el porcentaje de voto entre la Guardia Civil y la Policía Nacional a Vox es de los más altos de entre todos los sectores. De hecho, según Izquierda Diario, 6 de cada 10 policías nacionales votaron a Jupol, el sindicato de Jusapol, en las elecciones sindicales.

Miembros de Jusapol, como el policía y chirigotero Jesús Manuel Selma, el youtuber Jandro Lion, o el ultraderechista Alfredo Perdiguero, hicieron campaña abiertamente por la formación de Abascal. Éste ha seguido dirigiéndose a los miembros de la Policía Nacional y la Guardia Civil como un privilegiado caladero de votos. Para las generales cinco de sus cabezas de lista eran policías o guardias civiles y no ha dudado en posar incluso con camisetas de Jusapol. – Izquierda Diario.

Entre los más activos propagandistas de esa campaña policial ultraderechista figura el subinspector Alfredo Perdiguero, quien ha participado en charlas del partido de carácter neonazi Democracia Nacional y que fue sancionado con un expediente disciplinario y suspensión de dos meses por «crear alarma social» en un programa de 13TV a raíz de los atentados de París, según la Dirección General de la Policía.


Este tertuliano de programas televisivos de extrema derecha y fundador del ultraconservador Sindicato Independiente de la Policía Española (SIPE), saltó de Ciudadanos a Vox a principios de 2016. Argumentaba que su principal objetivo era «despolitizar a la Policía». Desde entonces, ha sido un hooligan de la formación dirigida por Santiago Abascal, líder de Vox, y ha celebrado sonadamente el éxito de Vox en Andalucía.  Diferentes fuentes policiales anónimas confirmaron esta politización de Jusapol en una entrevista exclusiva para Público en diciembre de 2018.

Los poderes públicos conocían, o al menos deberían saber, este avance del discurso fascista y la presencia de Vox en muchas manifestaciones de policías y guardias civiles (Jusapol, Jupol, Jucil y Afapol) impulsado por ciudadanos. Ahora, un núcleo muy peligroso para la democracia se ha instalado ya en las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado – Fuentes policiales anónimas.

Otro de los mayores agitadores de extrema derecha que le ponen la alfombra roja a Abascal es el youtuber Jandro Lion, quien ha llevado su militancia en Jusapol hacia el terreno más extremista. De hecho, varios de sus vídeos han sido puestos en privado por las polémicas desatadas a raíz de sus declaraciones.Este es uno de sus tweets, que demuestra claramente de lado de quien está:

Por supuesto, no todo el mundo en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado están de acuerdo con estos comportamientos. Es más, muchos de los policías que han observado estas campañas afirman que «estos individuos no pueden ser servidores públicos». Otros, no obstante, han abrazado a Vox, como reflejo de su afinidad por la ideología ultraderechista.

Actualidad


Miembros de Jusapol manifestándose frente a la casa de Pablo Iglesias e Irene Montero.
Autor: Jusapol, 06/03/2020. Fuente: Cuenta de Twitter @jusapol

En 2019,  las elecciones al Consejo de la Policía estuvieron marcadas por el meteórico ascenso del sindicato Jupol, candidatura impulsada por Jusapol. El conocido como «Vox policial» se llevó, con una amplia ventaja, la primera posición. Con una alta participación del 72,7% de los 66.700 policías nacionales llamados a votar, Jupol se llevó nada más y nada menos que el 58,4% de los votos y 8 de los 14 puestos del Consejo. Un dato relevante del apoyo de más de la mitad de los policías nacionales que participaron a la lista que representa la posición más radical dentro del cuerpo.

El 3 de marzo de 2020, Jusapol celebró un acto en Madrid. En aquella ocasión, saltaron el cordón policial y rodearon el Congreso. En ningún momento de produjo ninguna carga policial por parte de los que estaban trabajando en la seguridad de la zona.

Ni siquiera los agentes de la Policía Nacional que trabajan en el Congreso de los Diputados han movido un dedo cuando una diputada ha solicitado su seguridad para llegar hasta un coche y poder salir del hemiciclo. Han tenido que ser los trabajadores del propio Congreso quienes han tenido que ayudar a la diputada para poder salir de allí entre insultos y gritos. – Diario16.


Actualmente, dado que desde marzo el estado de alarma por la crisis del coronavirus todas las acciones a pie de calle se han paralizado, no se les ha visto demasiado. Jandro Lion, y también desde otras cuentas en las redes sociales, han seguido lanzando mensajes provocadores con consignas claramente contrarias al gobierno. No obstante, se han centrado en la crisis sanitaria y en exigir material y medidas de protección para el personal.

Una de sus últimas polémicas sucedió en marzo de 2020, cuando se concentraron frente a la casa del vicepresidente segundo del gobierno y secretario general de Unidas Podemos Pablo Iglesias y de la ministra de Igualdad Irene Montero, quienes residen en Galapagar como pareja con sus tres hijos. Desde el Ministerio del Interior, de hecho, expedientaron hasta a 10 agentes por este hecho, uno más de entre todas las acciones de acoso que han estado sufriendo durante días estas personas.

Ese mismo mes, Jucil, la asociación de la Guardia Civil vinculada a Jusapol, criticó duramente al gobierno por el cese de Diego Pérez de los Cobos en un polémico caso por la presunta falsificación de un informe en lo referente a una investigación.

En resumen, las acciones de Jusapol no pueden decirse que sean ni apolíticas, ni apartidista. Desde sus orígenes, a sus manifestaciones públicas, pasando por sus miembros y las relaciones que tienen con formaciones como Vox o Ciudadanos, revelan lo evidente: que es una formación ultraderechista a los intereses de estos grupos.

Fuentes, enlaces y bibliografía:

Foto destacada: Manifestación de JUSAPOL en Barcelona. Autor: Vox España, 29/09/2018. Fuente: Flickr. Dominio Público.

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