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Retiran la palabra a Vox en el Congreso por sus insultos y abandonan la cámara como protesta

El grupo parlamentario de Vox en el Congreso de los Diputados sigue escalando en su conflicto con el Gobierno de coalición debido a sus exabruptos. Esta vez los insultos de la bancada ultraderechista han venido de la mano de Patricia Rueda, diputada de la formación, que ha tildado de «filoetarras», «golpistas» y «delincuentes» a los socios de Gobierno, Esquerra Republicana de Catalunya y EH Bildu presumiblemente.

El suceso tuvo lugar alrededor de las 18:00 horas, tal y como narran diferentes medios de comunicación y como se puede comprobar en la grabación de la sesión de la cámara baja, cuando Rueda dijo desde la tribuna que «este Gobierno ningunea a Málaga y las regiones que son leales a España y premia a filoetarras, nacionalistas y golpistas».

Tras esta intervención, el vicepresidente de la cámara, Alfonso Rodríguez González de Celis (PSOE), que sustituía a la presidenta Meritxell Batet, llamó al orden a la diputada de extrema derecha. Ante la negativa de retractarse de su palabra y de retirar estos calificativos del diario de sesiones, la retiró el uso de la palabra y la invitó a regresar a su asiento. Patricia Rueda continuó negándose durante varios minutos hasta que, finalmente, se marchó ante el aplauso de su grupo parlamentario.

Ese momento fue el punto más alto de un tiempo prolongado de tensiones durante esta primera jornada de la sesión de pleno de del Congreso, marcada por varias interrupciones de la vicepresidencia a todos los grupos parlamentarios en un intento de que el debate no se desviara hacia otras cuestiones y no derivase en una mayor escalada del conflicto.

Tras esto, todo el grupo de Vox en el Congreso abandonó la sala y compareció ante la prensa, donde Santiago Abascal se reafirmó en todos los insultos vertidos a los socios de Gobierno y amenazó con agitar las calles.

Vox en el Congreso y la violencia política

Si bien es cierto que no es la primera vez que la bancada de extrema derecha protagoniza momentos de tensión en la cámara debido a sus calificativos hacia sus rivales políticos, esta vez la violencia política está llegando a un punto que hacía tiempo que no se veía, protagonizado por el grupo de Vox en el Congreso.

La semana pasada, la principal víctima de los insultos de la ultraderecha vino por parte de Carla Toscano, la cual dedicó una dura intervención a la ministra de Igualdad, Irene Montero, a la que llamó «libertadora de violadores» y que su único mérito había sido «estudiar en profundidad a Pablo Iglesias». Una intervención que se sucedió en el marco del debate de la llamada ley del «solo sí es sí» y que fue el culmen de una tensión entre ambas que venía gestándose desde hace meses, precisamente debido a las intervenciones de Toscano.

Un comportamiento que ocupó muy buena parte de los debates no solo en las instituciones, sino también a través de redes sociales, donde la izquierda en su totalidad e incluso parte de la derecha condenó el suceso y cerró filas alrededor de Montero, la cual dejó escapar varias lágrimas en la sesión tras acusar a la diputada de Vox de emplear «violencia política» contra ella, y tras las burlas de la propia Toscano ante la impotencia de la ministra.

La situación ha llegado a tal punto que desde Unidas Podemos han señalado una incorrecta aplicación de la normativa del Congreso al no retirar la palabra a Carla Toscano, si bien también han pedido la modificación del Código Ético para inspirarse en el que funciona en el Parlament de Catalunya.

El grupo de Vox en el Congreso, por su parte, ha denunciado también una mala aplicación de la norma, en este caso, se haya permitido que en la cámara se utilicen los términos «extrema derecha» o «ultraderecha» para referirse al partido de Santiago Abascal. Una defensa que han continuado esgrimiendo desde el partido a través de redes sociales y de los medios de comunicación.

Por otro lado, desde Vox aseguran que la petición de retirar un término del diario de sesiones por considerarlo inadecuado no implica ni retirar la palabra ni invitar al diputado de turno a volver a su asiento (art. 70.3), y que para ello debe aplicarse el art. 104, con lo cual serían necesarias al menos tres llamadas al orden.

Así, se da un nuevo episodio de violencia política de la mano de Vox en el Congreso, que podría estar alimentado por la proximidad de nuevas convocatorias electorales y por la profunda crisis que atraviesa la formación tras el desastre de las elecciones andaluzas y el enfrentamiento con Macarena Olona, que se ha traducido en una bajada considerable en los sondeos de intención de voto.

Retiran la palabra a Vox en el Congreso por sus insultos y abandonan la cámara como protesta

Adrián Juste

Jefe de Redacción de Al Descubierto. Psicólogo especializado en neuropsicología infantil, recursos humanos, educador social y activista, participando en movimientos sociales y abogando por un mundo igualitario, con justicia social y ambiental. Luchando por utopías.

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