California denuncia a grandes empresas petroleras por mentir sobre el cambio climático

El Fiscal General del Estado de California Rob Bonta, junto con el Gobernador de California Gavin Nesom, anunciaron el pasado sábado 16 de septiembre que habrían presentado una demanda contra el Instituto Americano del Petróleo (API) y contra cinco de las empresas petroleras más grandes a nivel mundial.

La denuncia tramitada abarcaría las supuestas campañas que habrían impulsado durante décadas mintiendo sobre el cambio climático en todo el Estado de California. La demanda afirma que las empresas petroleras sabían desde 1960 sobre los efectos perjudiciales de la quema de combustibles fósiles. Durante años estas campañas habrían restado importancia o habrían negado los efectos derivados de la quema de combustible como el calentamiento climático en declaraciones públicas y en anuncios y eslóganes en sus campañas de marketing.

California ha pasado por un proceso de adaptación al cambio climático donde el estado calcula haber gastado miles de millones de dólares para adaptarse y más que deberá gastar en el futuro al que nos abocamos. El Fiscal Bonta buscaría en nombre del estado de California aportar a estos gastos mediante la creación de un fondo que ayude a financiarlos ligados a la adaptación y de defensa contra eventos climáticos, la protección de los recursos naturales de California, el deterioro y de la destrucción de los mismos. Así mismo se busca por parte de la Fiscalía acabar con las declaraciones falsas y por la publicidad engañosa sobre los efectos de la quema de combustibles fósiles mediante sanciones.

Entre las pruebas que se presentan en la denuncia, hay numerosas que demuestran que los cusados durante mucho tiempo conocían los resultados de los estudios científicos y de las consecuencias que podrían ocurrir por el uso de combustibles fósiles.

En un comunicado emitido por Rob Bonta se podía leer «Las empresas petroleras y gasísticas conocen la verdad desde hace décadas: que la quema de combustibles fósiles provoca el cambio climático… pero nos han alimentado con mentiras y falsedades para aumentar sus beneficios sin precedentes a costa de nuestro medio ambiente. Ya basta»

El engaño de las empresas petroleras

La Fiscalía ha animado a estados y municipios que han presentado sus propias quejas en pos de responsabilizar a las empresas por sus campañas de engaños que habrían empeorado la crisis climática que cada vez es más acuciante.

Las causas de acción que incluye la demanda serían la de daños a los recursos naturales, publicidad falsa, marketing engañoso, prácticas comerciales ilegales, injustas o fraudulentas, y responsabilidad ante negligencias.

El fiscal General Bonta desde que obtuviera el cargo en 2021 ha liderado los esfuerzos en la protección del medio ambiente, ampliando la oficina de justicia ambiental, abriendo investigaciones sobre las industrias de combustibles fósiles y petroquímicos sobre la producción y contaminación de plásticos.

Hay que recordar que en el pasado las tabacaleras fueron procesadas por haber realizado engaños en su publicidad y ocultar los estudios científicos que ligaban el consumo de tabaco a consecuencias adictivas y mortales. En el proceso las tabacaleras tuvieron que admitir el haber estado mintiendo y cuya sanción final se tradujo en la bancarrota de las tabacaleras que fueron acusadas superando el valor de las empresas la indemnización que reclamaba la fiscalía.

El negacionismo de la extrema derecha: el negocio de las élites

La extrema derecha se ha destacado por llevar un negacionismo climático sobre los eventos extremos que azotan al planeta y que la comunidad científica lleva informando desde los años 90.

El cambio climático es hoy un consenso científico, en el que están de acuerdo la totalidad de organizaciones científicas de investigación y organismos de los gobiernos del planeta. Se podría pensar que la extrema derecha lo niega por necedad o por un simple carácter conspiracionista. Pero la realidad es que esto no cuadra con muchos líderes de la extrema derecha, que solo utilizan las teorías de la conspiración, pero que entre ellos las desprecian.

La realidad es más triste. Buena parte de los líderes de la ultraderecha son conocedores del cambio climático. Pero actuar contra él sería un golpe para el sistema capitalista y en especial, para los beneficios milmillonarios de multitud de industrias. Ante la urgencia de cambio, ante la grave crisis y los límites del planeta, la extrema derecha se muestra como el garante de una promesa imposible: que nada cambie o que este cambio sea a peor. Y esta promesa que resulta tentadoras para algunos, es en verdad solo un intento de asegurar las fortunas de unas pocas élites.

El colapso del planeta y la seguridad de la vida les da igual, contando con que por este pago obediente, serán las élites las que se salven del apocalipsis climático. Solo entendiendo este objetivo, se puede entender el interés de las élites extremistas en negar una realidad que cada día es más evidente.