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Emmanuel Macron y Marine Le Pen pasan a la segunda vuelta en las elecciones presidenciales de Francia

Este domingo, las elecciones presidenciales de Francia no fueron ninguna sorpresa. Los sondeos de intención de voto ya auguraban que el presidente Emmanuel Macron y Marine Le Pen, candidata de extrema derecha por Agrupación Nacional (RN), pasarían a la segunda vuelta, prevista para el 24 de abril y repitiendo el enfrentamiento electoral que tuvieron en 2017.

Con el 99% de escrutado a la fecha de publicado este artículo, el liberal Macron tendría el 27,6% de los sufragios con 9 millones y medio de votos, mejorando considerablemente sus resultados en comparación con las pasadas elecciones, donde obtuvo el 24%. Seguidamente, la ultraderechista Le Pen obtuvo el 23,41% y unos 8 millones de votos, lo que supone también una mejora de sus resultados con respecto a 2017 en dos puntos porcentuales.

Dado que ningún candidato obtuvo más del 50% de los votos, según el sistema electoral francés, Macron y Le Pen irán a una segunda vuelta donde la ciudadanía francesa tendrá que elegir entre ambos, que han apelado a la unidad y a su proyecto político como el único viable para Francia.

Sorpresa en la izquierda

En tercer lugar, dio la sorpresa Jean-Luc Melénchon, candidato izquierdista de La Francia Insumisa, que consiguió capitalizar el voto de la izquierda alrededor de su candidatura alcanzando el 22% de los sufragios con 7 millones y medio de votos, mejorando también sus resultados en casi tres puntos y quedándose al borde de pasar a la segunda vuelta.

Melénchon, que concurre por tercera vez a unas elecciones, empezó la carrera electoral en una de las últimas posiciones de la lista. La izquierda alternativa se presentaba a las elecciones dividida y marcada por la agenda conservadora, donde la presentación inicial de Eric Zemmour, el polémico candidato de extrema derecha que incluso amenazaba con eclipsar a Le Pen, acaparó buena parte de la atención.

Sin embargo, Zemmour se desinfló rápidamente, ahogado en polémicas como denuncias y sentencias por delito de odio y en declaraciones cada vez más absurdas, ante las cuales Le Pen subo imponer un relato más moderado. Finalmente, obtuvo el 7,1% quedándose en cuarto lugar y después de haber llegado a tener más del 20% de intención de voto.

Por otro lado, Los Republicanos y el Partido Socialista, las formaciones políticas tradicionales de Francia, consolidaron su caída, reflejando la transformación política en el país. Valérie Pécresse, candidatura del partido de derecha conservadora, obtuvo el 4,8% de los sufragios, mientras que Anne Hidalgo, alcaldesa de París y candidata de centro izquierda, obtuvo el 1,7%.

En sexto lugar quedó Yannick Jador, de Los Verdes, debutó con el 4,58% de los sufragios, un resultado histórico para una candidatura ecologista en Francia. Seguidamente, en séptimo lugar, Jean Lassage de centro derecha de ¡Resistamos!, con un 3,16% de los votos. Por último, en este orden, Fabien Roussel del Partido Comunista Francés con un 2,31%; el ultraderechista Nicolas Dupount-Aignan de Ponte en Pie Francia con un 2,07%; Philippe Poutou de Nuevo Partido Anticapitalista con un 0,77%; y Nathalie Arthau del partido trotskista Lucha Obrera con un 0,57%.

Una campaña marcada por la guerra en Ucrania

La contienda electoral ha sido un tanto atípica por las consecuencias de la invasión de Rusia a Ucrania y que ha tenido a Macron a medio gas, ocupado en la gestión gubernamental y en las consecuencias que el conflicto bélico han sacudido al país, como la subida de los precios de la luz y del gas y que han llevado al candidato liberal a dar un giro a su discurso.

No obstante, Le Pen ha ido presentando ligeras bajadas y oscilaciones normalmente también vinculadas con la guerra. En enero, tras la publicación del informe de la Eurocámara que revelaba su colaboración con el gobierno de Putin y al inicio de su precampaña, a finales de abril y principios de marzo, con la retirada de 1,2 millones de folletos electorales en los que aparecía en una foto con Putin.

Macron siempre ha sido elegido por “falta de mejores alternativas”, más que ser un “presidente popular”, como afirma el periodista Pierre Briançon. Experto que, además, confirma que las reformas hechas por el presidente no han conseguido que Francia sea más competitiva, ya que el déficit por cuenta corriente se ha duplicado durante su mandato, alcanzando hasta el 1,4% del PIB durante este año, según el Fondo Monetario Internacional.

Todo ello, junto a algunas retóricas como el retraso de la edad de jubilación y el aumento del presupuesto en defensa, han ido erosionando la opinión pública restándole ligeramente los índices de popularidad. Discurso al que Le Pen no ha dudado en referir, atacando su incapacidad: ”Incapaz de defender su desastroso historial, Emmanuel Macron no tiene otra medida que ofrecer a los franceses que no sea la jubilación a los 65 años”.

Encuesta de intención de voto en la primera vuelta de las elecciones en Francia. Fuente: IFOP
Encuesta de intención de voto en la primera vuelta de las elecciones en Francia. Fuente: IFOP

Asimismo, mientras la ultraderechista ponía en marcha toda su maquinaria electoral, Macron se centraba en sus responsabilidades con Francia, con la Unión Europea y con el conflicto en el este.

Sin lugar a dudas, esta cita electoral no ha sido como la de 2017 y, aunque Macron ha conseguido distanciarse más con Le Pen, los sondeos de intención de voto auguran un empate técnico en la segunda vuelta. De hecho, el presidente afirmaba delante de su equipo de campaña: “El gran peligro es que la gente piense que está todo decidido. Si piensan eso hemos perdido”.

Por tanto, el gran némesis de Macron sería el abstencionismo en las urnas. De hecho, la participación finalmente ha sido del 74,82%, tres puntos más que en 2017 y cerca del 30%, como auguraban los sondeos. Para combatirlo, Macron ha intentado modular su discurso hacia la gente joven y ciertos sectores de la izquierda. Esto se ha traducido en una nueva moderación de su discurso, pidiendo incluso la nacionalización del sector eléctrico.

Como la extrema derecha le pisa los talones, el presidente galo, en su campaña, no ha cesado en sus atauqes al tándem Le Pen-Zemmour alentando de los peligros de banalizar a la ultraderecha, como bien informó Europa Press. A lo que Zemmour, con su tono condescendiente, le reprochó que “no hay tándem, ni extrema derecha”, lo que hay es “un presidente que no hace nada, no dice nada, no piensa nada y que apuesta toda su reelección a una final con Marine Le Pen”.

Le Pen le ha llegado a atacar el argumentario de Macron metiéndola en el mismo paquete que el radical Zemmour como “comentarios irresponsables” y que “su falta de argumentos” le hace “huir del debate”.

Muchos expertos coinciden en que Zemmour ha impulsado a Le Pen. Aunque los dos ultraderechistas convergen en ciertas ideas clásicas de esta línea de pensamiento, presentan profundas divisiones ideológicas que han abierto huecos en el espectro político de los que se ha apropiado de líder de Reconquista.

Unidad contra la extrema derecha en Francia

Prácticamente en cuanto estuvo claro que Melénchon se quedaría a las puertas de la segunda vuelta, todas las candidaturas pidieron el voto para Macron con la intención de evitar que Le Pen se haga con la presidencia del país, lo que ya sucedió en 2017. Incluso las candidaturas de extrema izquierda apoyaron sin miramientos al candidato liberal para establecer un «cordón sanitario» a la ultraderechista, pidiendo a sus seguidores un esfuerzo para acudir a las urnas.

Las únicas candidatura que apoyaron a Le Pen fueron las de Éric Zemmour y la de Nicolas Dupont-Aignant, ambos considerados de extrema derecha.

Así, la segunda vuelta se augura muy igualada. En las dos semanas que quedan por delante, podría pasar cualquier cosa, y el temor a que la extrema derecha acceda por primera vez al gobierno de la Quinta República de Francia podría hacerse realidad.

Enlaces y fuentes:

– Foto de portada: Macron. Autor: Kremlin.ru, 09/12/2019. Fuente: Kremlin.ru / CC BY 4.0

Emmanuel Macron y Marine Le Pen pasan a la segunda vuelta en las elecciones presidenciales de Francia

Adrián Juste

Jefe de Redacción de Al Descubierto. Psicólogo especializado en neuropsicología infantil, recursos humanos, educador social y activista, participando en movimientos sociales y abogando por un mundo igualitario, con justicia social y ambiental. Luchando por utopías.

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