Comunicado de Al Descubierto sobre el conflicto entre Israel y Palestina
Desde la asociación Al Descubierto, condenamos de manera firme el ataque realizado por la organización yihadista Hamás el 7 de octubre de 2023, más concretamente, su brazo armado, las Brigadas de Ezzeldin Al-Qassam, a la población civil de Israel que, en colaboración con otros grupos armados como Yihad Islámica Palestina, provocaron la muerte de alrededor de 1.300 personas y secuestraron a unas 150 personas, en lo que Human Rights Watch califica como crímenes de guerra según el derecho internacional.
Seguidamente, condenamos las acciones que ha llevado a cabo el Gobierno del Estado de Israel contra la población palestina residente en la Franja de Gaza, incluyendo bombardeos indiscriminados que han afectado a viviendas y estructuras críticas como centros de salud, colegios o carreteras, que se han saldado con más de 3.000 personas fallecidas y más de 10.000 heridas, incluyendo periodistas o personal sanitario que habían acudido al conflicto, a fecha de 18 de octubre.
Condenamos también la decisión del Gobierno del Estado de Israel de aislar la Franja de Gaza, bloqueando la ayuda humanitaria y cortando los suministros de electricidad, agua y combustibles que, desde el anuncio de lo que desde el gobierno israelí ha calificado como “asedio total”, ha dejado sin recursos a más de 2 millones de personas, de las cuales alrededor del 40% son menores de edad, amenazando con provocar una catástrofe humanitaria, en lo que la agencia de refugiados de las Naciones Unidas ha calificado también de crimen contra la humanidad, así como Amnistía Internacional, que lo califica de «castigo colectivo». Un bloqueo que, no obstante, lleva produciéndose desde el año 2007.
En este sentido, condenamos firmemente la orden dada por el Gobierno del Estado de Israel de ordenar el desplazamiento de alrededor de un millón de personas al sur de la Franja de Gaza en menos de 24 horas, dejando un único corredor seguro hacia Egipto que, además, fue también bombardeado, tal y como denunció Amnistía Internacional e informaron diversos medios.
Desde Al Descubierto condenamos al Gobierno del Estado de Israel por utilizar fósforo blanco para bombardear a la población civil en Gaza y en Líbano, un arma que provoca quemaduras y malformaciones permanentes, que ya empleó en 2014 y que cuyo uso está prohibido por el derecho internacional desde 1997.
Condenamos también el abuso de los derechos fundamentales que está también realizando el Gobierno de Israel al presionar, retener y amenazar a periodistas que acuden a realizar su trabajo a la zona del conflicto, tal y como han denunciado grandes medios como la BBC, así como el empleo de la violencia y de armas de fuego real contra las protestas que se han dado en Cisjordania en favor de la población Palestina y que se ha saldado con 16 personas muertas y varias heridas.
Desde Al Descubierto queremos condenar también el sensacionalismo, los bulos y la desinformación que se están sucediendo en estos momentos, como el caso de los 40 bebés decapitados por Hamás o que varios grandes medios anuncien las protestas en favor del pueblo palestino como protestas en favor de Hamás, una cuestión ya rectificada por BBC News.
Más allá de este nuevo conflicto, desde Al Descubierto condenamos al Gobierno de Israel por sus crímenes y violaciones de los derechos humanos al imponer lo que el relator especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) calificó de “apartheid” para definir la situación en la que vive la población palestina, donde sus derechos se ven seriamente limitados y sufren grandes discriminaciones con respecto al resto de la población ya que, por ejemplo, no se admite que la población palestina sea ciudadana de pleno derecho del Estado de Israel al mismo tiempo que no se acepta la existencia del Estado de Palestina, todavía con reconocimiento limitado. No consideramos admisible que, como consecuencia de esta situación, las personas palestinas no puedan circular libremente por el país, ni votar, ni decidir sobre asuntos que les afectan a nivel general. Situación denunciada también por Amnistía Internacional, Human Rights Watch e incluso políticos y grupos israelíes, críticos con esta situación.
Denunciamos la situación de la población palestina en este sentido, que se encuentra confinada, con alguna excepción, en zonas concretas con dificultades o la imposibilidad de circular libremente, o bien ha sido desplazada de sus hogares perdiendo sus propiedades, una situación también denunciada por las Naciones Unidas. Una situación que se observa no solo en la Franja de Gaza, sino también en Cisjordania, donde el territorio está dividido en asentamientos israelíes que controlan y/o impiden la movilidad de la población palestina. El Tribunal de la Haya declaró que el muro de Cisjordania era contrario al derecho internacional en 2004 porque impedía la capacidad de autogobierno del pueblo palestino. En 2021, abrió una investigación por los asentamientos israelíes y posibles crímenes de guerra en Gaza.
Condenamos, además de estas violaciones y abusos de los derechos humanos, otras denunciadas por asociaciones como Amnistía Internacional, que denunció que la población palestina había sido objeto de asesinatos extrajudiciales, torturas y otros crímenes, que en 2022 documentó en un informe de 280 páginas en lo que calificaron de crímenes de lesa humanidad.
Al Descubierto, como asociación que aboga por el fin de los crímenes de odio y la desinformación, mostramos nuestro rechazo absoluto y nuestra condena firme al empleo de la violencia y al abuso de los derechos y las libertades de la población civil como método para perseguir fines políticos o de otra índole.
También denunciamos las actitudes racistas, xenófobas, supremacistas y fundamentalistas que han caracterizado al conflicto, tales como tildar a la población palestina de “animales” por parte del Gobierno del Estado de Israel. Por otro lado, condenamos las conductas y actitudes antisemitas hacia la población judía. En este sentido, desde Al Descubierto abogamos por diferenciar entre la población judía de su gobierno y de los sectores radicales, así como entre la población palestina y organizaciones como Hamás.
En este sentido, pedimos por el fin inmediato de las hostilidades y que el Estado de Israel cumpla con el derecho internacional y con las resoluciones de las Naciones Unidas, que estipuló en su resolución n.º 1397 (2002) que “dos Estados, Israel y Palestina, vivan uno junto al otro dentro de fronteras seguras y reconocidas”, lo que implicaría también poner fin al estado de ocupación del Estado de Israel de territorios palestinos y de las limitaciones de derechos de la población palestina residente. Consideramos que la ocupación actual de Gaza y Cisjordania en 1967, por lo tanto, es contraria al derecho internacional.
Desde Al Descubierto, pedimos a la comunidad internacional que asegure la ayuda humanitaria a la población palestina y que tome las acciones necesarias para asegurar el cumplimiento del Estado de Israel de las resoluciones de la ONU y del derecho internacional, abriendo los cauces diplomáticos para poner fin a un conflicto que dura décadas. Condenamos la postura de ciertos países, gobiernos y partidos políticos que toman parte y que, por intereses particulares, económicos, sociales o geopolíticos, deciden ignorar los crímenes cometidos en el conflicto o solo miran los de uno de los bandos. En este sentido, apelamos al sentido común de la sociedad palestina e israelí que aboga por una solución pacífica basada en en estos preceptos.
Por último, desde Al Descubierto solicitamos que aquellos personas y organizaciones que hayan violado el derecho internacional sean juzgadas por la Corte Penal Internacional y que sus acciones tengan consecuencias legales.